Borgarello, Miguel Pablo

(Angélica, Santa Fe, 1906 – Córdoba, 1995)
Nació en Angelica, provincia de Santa Fe, lugar donde se instalaron sus abuelos, inmigrantes piamonteses. En 1910 su familia se trasladó a la provincia de Córdoba, primero a la campaña de Pozo del Molle, y luego a la ciudad de San Francisco. Con veintiún años, en 1927, ingresó a la Academia Provincial de Bellas Artes [APBA] en la ciudad de Córdoba. Fueron sus profesores Carlos Camilloni y Emiliano Gómez Clara, entre otros. Siendo estudiante concurrió a las tres ediciones del Salón Libre de Artes (1927, 1928, 1929), evento organizado por un grupo de estudiantes de la APBA a modo de reclamo por la falta de estímulos provenientes de los estados provincial y municipal. En 1929 expuso en el Salón Fasce, junto al escultor Miguel Ángel Budini, un importante conjunto de obras de su autoría, obteniendo buenas críticas.
Al finalizar los estudios en la APBA retornó a San Francisco para desarrollar, desde allí, una intensa actividad artística. Ya instalado en esa ciudad formó junto a otros artistas –Raúl Machado, Francisco Molina, Arturo Lescano, Alfredo Vallini y Víctor Tarabini- la primera peña artística de San Francisco, denominada “Nui”. En 1931 concurrió por primera vez al Salón Nacional de Bellas Artes de Buenos Aires [SNBA] con la obra Patio del Museo Virrey Sobremonte. Interesado en continuar su formación a través del viaje de estudio, en 1936 se presentó al concurso para optar por una de las becas provinciales para el perfeccionamiento artístico, en la categoría pintura, finalmente otorgada al pintor Ernesto Soneira.
En 1939 fue designado Director de la Academia Municipal de Bellas Artes de San Francisco, cargo que ocupó hasta su jubilación. En ese espacio educativo conoció también a Elisa Amalia Damiano (conocida como Elisa Damar), con quien contrajo matrimonio en 1942 y compartió el ejercicio de la docencia y el trabajo artístico.
Además de la pintura, Borgarello incursionó en otras disciplinas. En 1933 exhibió grabados en el Salón Plasman de Córdoba y, luego, en 1934 y 1936, en San Francisco, junto al artista Alfredo Vallini, expuso trabajos de diversas disciplinas -pintura, escultura, cerámica, grabado y diseño-. Paralelamente, durante estos años realizó ilustraciones para diversos medios gráficos: Elévate (San Francisco), Cumbres (Córdoba), La Voz de San Justo y su Magazine, Los Principios, La Nota, Ahora, Ciudad (publicación del Partido Demócrata Nacional), entre otras publicaciones periódicas, e ilustró también la tapa para la edición de Marxismo y medicina de S. Libedinski (1934, Bs. As.).
A partir de los años cuarenta se evidenció un marcado interés por el trabajo escultórico; en muchos casos se enfocó en el diseño y ejecución de piezas de carácter monumental destinadas al espacio público. Se destacan entre otras las siguientes obras: Cincuentenario en la ciudad de Porteña, Córdoba (1942); Madre tierra, realizado en colaboración con Elisa Damar, en la ciudad de Morteros, Córdoba (1944); Bamba, inspirado en el poema homónimo de Ataliva Herrera, emplazado en Villa del Lago, Carlos Paz (ejecutado entre 1948 -1952); el monumento a J. B. Iturraspe fundador de la ciudad de San Francisco (1955). Aunque no llegó a concretarse, en 1952 proyectó realizar un monumento arquitectónico inspirado en Eva Perón, de dimensiones tales que fuera capaz de contener un vasto edificio -un colegio o un hospital-. 
En 1952 le fue adjudicada por concurso la ejecución de una de las obras destinadas a la Legislatura Provincial. Se trataba de un retrato del entonces presidente Juan D. Perón que, junto a los de San Martín y Eva Perón encomendados respectivamente a Edelmiro Lescano Ceballos y Francisco Vidal, fue instalado al año siguiente en el recinto parlamentario.
En septiembre de 1959, ya retirado de la labor docente, inició un viaje de más de un año de duración, que lo llevó a recorrer varios países europeos (España, Francia, Holanda, Inglaterra) y Marruecos en el Norte de África. En España entabló amistad con el pintor español Daniel Vázquez Díaz. Producto de esa estadía fueron ejecutadas un conjunto importante de obras que remiten tanto a la escena española como a los motivos marroquíes que expuso luego de su regreso al país en varias oportunidades.
En 1973, se mudó a la ciudad de Córdoba donde continuó activamente comprometido con la actividad artística, especialmente expositiva.
Su producción artística comprende diferentes disciplinas -pintura, escultura y grabado-, caracterizándose por un eclecticismo notorio en lo estilístico, además de una heterogeneidad en relación a lo temático. Sus primeras pinturas abordan tanto el retrato como las escenas y el paisaje y llaman la atención de la crítica de arte, en sentido positivo, por su carácter decorativo. Son advertidos, igualmente, en sus primeras exposiciones, ciertos elementos que lo acercan tanto al pintoresquismo y al costumbrismo, como a las tendencias nativistas en auge por esos años; en ese sentido se reconoce la gravitación que tienen sobre su obra figuras tales como Jorge Bermúdez, Alfredo Gramajo Gutiérrez, Fernando Fader
A partir de los años cuarenta se evidencia una mayor atención a la escultura que se traduce en la multiplicación de propuestas para monumentos de gran escala. El crítico e historiador del arte, Ángel Lo Celso, señaló al respecto: “(…) el lenguaje de sus obras escultóricas tiene acento de universalidad. Justas las relaciones espaciales y la composición, conexión invariable entre volumen, huecos y espacio, sobriedad en las superficies, modelado de gran fuerza expresiva y secreta poesía que brota como un canto en cada obra.”       
La producción gráfica, que representa un extenso segmento dentro de la obra de este artista, no es ajena a las tendencias costumbrista y nativista que se dan también en la pintura, según las cuales recupera tipos nativos, costumbres, folclore y temas religiosos; en el grabado avanza también sobre territorios oníricos y surreales, demostrando en general seguridad en el manejo técnico.    
En 1991 presentó el libro Introducción al arte Plástico de su autoría.
A lo largo de su trayectoria realizó diversas exposiciones individuales, entre ellas se destacan: Salón Plasman, Cba. (1936); Galería Van Riel, Bs. As. (1947); Jockey Club Córdoba, en el marco de la “Semana de la tradición” (1951); Galería Argentina, Bs. As. (1952); Galería Renom, Rosario (1954); Barraca Trapalanda, Río Cuarto (1955); Jockey Club Córdoba, exposición “Treinta años de labor en pintura. Miguel P. Borgarello 1928-1958” (1958); Jockey Club San Francisco (1962); Galería Feldman, Cba. (1963); “Exposición cuarenta años de labor” -exposición individual desdoblada según disciplinas en diferentes espacios expositivos- Galería Lautrec, Jockey Club, Galería Feldman y Galería Cristal, Cba. (1967); Galería de Arte Córdoba (1974); Galería de Arte Colegio de Escribanos, Cba. (1974); Museo Genaro Pérez, Cba. (1978); Galería Gaudí, Cba. (1990); Jockey Club Córdoba (1991).
También participó de diversos certámenes artísticos obteniendo, entre otras, las siguientes distinciones: Premio “Gobernador de Córdoba”, I Salón de Otoño de Los Principios (1933); Premio “Cámara de Diputados de la Provincia de Córdoba”, Medalla de Oro, pintura (obra El patio de la higuera), II Salón de Otoño de Los Principios (1934); Premio “Cámara de Senadores de la Provincia” y Segundo Premio en el Salón Municipal de San Francisco; Premio “Excelentísimo Señor Presidente de la Nación Gral. P. Justo”, IV Salón Otoño diario Los Principios (1936); Premio Cámara de Senadores de la Nación, en el Salón Municipal de San Francisco (1937); Tercer Premio en el Concurso para el monumento a Jerónimo Luis de Cabrera, organizado por la Municipalidad de Córdoba; Tercer Premio en el Concurso de ante proyectos para el monumento a Hipólito Yrigoyen, junto a Elisa Damar (1942); Primer Premio en el concurso para el monumento a Margarita Gervasoni, Coronda, Santa Fe (1943); Premio Estímulo Escultura, Salón Nacional de Bellas Artes, por Taumaturgo (1945); Premio “Cámara de Senadores de Córdoba.”, Medalla de Oro, Pintura, Salón de Artes Plásticas de Córdoba, por Zamba (1951); Primer Premio en el concurso para el monumento a J. B. Iturraspe, fundador de la ciudad de San Francisco, Cba.(1955); Segundo Premio, Grabado, Salón Nacional de Bellas Artes, por Tríptico Bíblico (1964).
[R. Otero]


Obras

Ave mensajera
Capataz
Circense
Complejidad
Criollo
Criollo

Criollo ladino
Criollo soñador

Cristo
Dos mundos

El Crispín
El pájaro azul
En la loma
Eternidad

Familia criolla
Figura
Fortinero
Gaucho
Gaucho arriero
Gaucho salteño
Hambre
Higuera y rancho
Horno carbonero
Indiferencia
Jinete
La búsqueda
La higuera
La Salamanca
Lapso
Martín Fierro
Mensaje
Mi abuelo
Modelos
Mujer bíblica
Nocturno
Ñusta
Obrero
Ofrenda
Pala pala
Pastorcito
Poeta
Quinquela
Quirós
Ritmos
Será cierto
Sorpresa (dame vos tu papelito)
Trigo
Una madre
Venus apocalíptica
Viejo Vizcacha









Temporánea Nº3 (serie «Temporáneas – 1a. serie»)
Capataz